Quedan unas semanas para que comience la feria de Sevilla y la gente habla de trajes nuevos,de atracciones, de casetas, de calles...
Llevo varios años asistiendo a la feria pero todavía no consigo imaginarmela. Para mi es un mundo diferente, lleno de olores, ruidos, voces, pisadas de caballos, la musica de las atracciones...
Mi madre se esfuerza por integrarme en esta peculiar fiesta. Me ha enseñado a bailar sevillanas y me ha comprado un traje. Me hace muy feliz pensar que colaboro activamente en la feria, que soy una más. Ya nada me diferencia de ellos. Pero todos estos pensamientos se desvanecen cuando caigo en la cuenta de que no es así y me frustro al pensarcómo será realmente mi traje, porque aveces no es suficiente con que te lo describan o lo toques.
En la mente de cualquier persona de mi edad hay recuerdos, imágenes, sonidos, voces... Y por lo que la vida les ha enseñado juzgan a las personas por la apariencia. En cambio mi mente se inunda al pensar cómo es realmente el mundo.¿Es como yo lo imagino?¿O tan solo es producto de mi mente y mis experiencias?.
Sea lo que sea estoy aprendiendo a disfrutar lo que me rodea y doy gracias de que al menos no juzgo a las personas por su apariencia, y cuando no pueden transmitirme lo que sienten mirándome a los ojos, me permiten tocar su alma con su voz.
Llevo varios años asistiendo a la feria pero todavía no consigo imaginarmela. Para mi es un mundo diferente, lleno de olores, ruidos, voces, pisadas de caballos, la musica de las atracciones...
Mi madre se esfuerza por integrarme en esta peculiar fiesta. Me ha enseñado a bailar sevillanas y me ha comprado un traje. Me hace muy feliz pensar que colaboro activamente en la feria, que soy una más. Ya nada me diferencia de ellos. Pero todos estos pensamientos se desvanecen cuando caigo en la cuenta de que no es así y me frustro al pensarcómo será realmente mi traje, porque aveces no es suficiente con que te lo describan o lo toques.
En la mente de cualquier persona de mi edad hay recuerdos, imágenes, sonidos, voces... Y por lo que la vida les ha enseñado juzgan a las personas por la apariencia. En cambio mi mente se inunda al pensar cómo es realmente el mundo.¿Es como yo lo imagino?¿O tan solo es producto de mi mente y mis experiencias?.
Sea lo que sea estoy aprendiendo a disfrutar lo que me rodea y doy gracias de que al menos no juzgo a las personas por su apariencia, y cuando no pueden transmitirme lo que sienten mirándome a los ojos, me permiten tocar su alma con su voz.